Sinaí: el monasterio de Santa Catalina se reúne para elegir al nuevo superior
Para mañana por la mañana está prevista la convocatoria de una asamblea general extraordinaria. En los últimos días, el higúmeno Damianos ha presentado su renuncia tras tensiones internas y un enfrentamiento con el patriarca Teófilo III. En los últimos meses, el histórico edificio ha sido objeto de una (controvertida) sentencia de expropiación por parte de las autoridades egipcias.
El Cairo (AsiaNews) - En una fase crítica de su historia, tras meses de polémicas y tensiones por una sentencia de expropiación de un tribunal egipcio, el monasterio de Santa Catalina en el Monte Sinaí, el más antiguo del mundo aún en funcionamiento, anuncia la convocatoria de una asamblea general extraordinaria. La Hermandad Sinaítica ha convocado la reunión para mañana por la mañana a las 11:00 horas, con el fin de decidir el nombramiento del nuevo egumeno y arzobispo (griego-ortodoxo) y superar una etapa de profundas divisiones y problemas, también internos.
El arzobispo Damianos había sido destituido por algunos monjes, a quienes el superior desautorizó posteriormente, lo que provocó una fractura que también contó con la intervención del patriarcado greco-ortodoxo de Jerusalén y del primado Teófilo III. Convocado por este último para comparecer el pasado 8 de septiembre ante el Santo Sínodo (la asamblea de obispos ortodoxos), el egumeno no se presentó en la ciudad santa, sino que, mediante una carta, presentó su renuncia y el abandono definitivo del monasterio.
Según explica la nota emitida por la secretaría del histórico lugar de culto cristiano, el proceso electoral seguirá varias fases específicas para el nombramiento del sucesor del arzobispo Damianos. Una decisión que llega tras una fase de duras disputas y polémicas con el patriarca, además de las dudas sobre el futuro del edificio, aunque la mediación del gobierno griego y la intervención de la presidencia egipcia parecen haber resuelto (por el momento) la controversia.
La primera fase prevé el nombramiento del presidente y del secretario de la Asamblea, seguido de la finalización de la lista de miembros regulares de la Cofradía Sinaítica y de aquellos que pueden votar en las elecciones. El siguiente paso es la elaboración de la lista de candidatos, la aprobación del texto del acuerdo entre el arzobispo y la Cofradía, la determinación de los detalles del procedimiento electoral y el nombramiento de la comisión electoral.
El sagrado monasterio de Santa Catalina, situado a los pies del monte Sinaí, es, de hecho, un testimonio del legado perdurable de la fe, la erudición y la armonía interreligiosa. Fundado en el siglo VI por el emperador Justiniano I, es el monasterio cristiano más antiguo del mundo habitado ininterrumpidamente y se encuentra en el lugar donde Dios se apareció a Moisés en la zarza ardiente y bajo el monte del Decálogo, donde le confió las tablas de la Ley.
Un terreno que ha alimentado a santos como Juan Clímaco y Gregorio del Sinaí, conservando el patrimonio arqueológico y espiritual más preciado de la cristiandad; entre los muchos ejemplos encontramos la famosa biblioteca del Sinaí con sus antiguos manuscritos y la colección más importante del mundo de iconos sobre tabla pre iconoclasta. A finales de mayo, las autoridades egipcias, mediante una decisión judicial, impusieron el cierre del monasterio, el más antiguo del mundo aún en funcionamiento, confiscaron las propiedades anexas y las transfirieron al Estado, e impusieron la expulsión de los religiosos.
En su carta de renuncia, el arzobispo Damianos hizo referencia a las dificultades y amenazas a las que se ha enfrentado el monasterio a lo largo de su dilatada historia: «Desde entonces, hemos soportado muchas tormentas, hemos enfrentado muchos peligros... Con firmeza y perseverancia he mantenido fuera de los muros de nuestro monasterio a todos aquellos que han tratado de dañarlo». En su carta expresó su preocupación por el futuro del monasterio, señalando graves desafíos: «La grave cuestión de la confiscación judicial y el embargo de los bienes de nuestro monasterio, que acaba de comenzar, amenaza su propia existencia y continuidad histórica. Al mismo tiempo, nuestro monasterio sigue siendo legalmente inexistente en Egipto». Por último, subrayó la necesidad de «unidad y apoyo» en torno al nuevo abad, «lejos de ambiciones y obsesiones personales».
17/12/2016 13:14