Bután: Delhi acelera en materia de energía e infraestructuras para frenar el avance de Pekín en el Himalaya
La visita del primer ministro indio Narendra Modi a Timbu marca un nuevo capítulo en la competencia estratégica entre India y China. Nueva Delhi ha anunciado una línea de crédito de 40.000 millones de rupias y ha inaugurado la central hidroeléctrica Punatsangchhu-II, destinada a reforzar la interdependencia energética entre ambos países. Las medidas de la India se producen mientras China intensifica las negociaciones fronterizas con Bután, en un proceso que podría redefinir zonas altamente sensibles como las mesetas de Doklam, Pasamlung y Jakarlung.
Nueva Delhi (AsiaNews) - La India da un nuevo paso para consolidar su presencia estratégica en Bután, en un momento en el que China también está intensificando sus intentos de acercamiento al reino budista. La reciente visita del primer ministro indio Narendra Modi a Timbu, capital de Bután, ha dado lugar al anuncio de nuevas ayudas financieras y a la inauguración de un importante proyecto hidroeléctrico.
Modi también anunció una línea de crédito por valor de 40.000 millones de rupias, unos 455 millones de dólares, destinada a financiar proyectos energéticos, pilar de la cooperación entre ambos países. La India considera la estabilidad del reino un factor clave para su propia seguridad, sobre todo frente a Pekín, que ha intensificado sus contactos con Timbu y ha avanzado en las negociaciones sobre las fronteras.
Durante la visita, el primer ministro indio participó en las celebraciones del cumpleaños del padre del actual soberano, Jigme Khesar Namgyel Wangchuck. Modi describió la colaboración con Bután como «un modelo para toda la región», destacando cómo la confianza y los objetivos compartidos han permitido a lo largo de los años la realización de proyectos a gran escala. El primer ministro indio también recibió la «Orden del Druk Gyalpo», la más alta distinción civil de Bután, convirtiéndose en el primer jefe de Gobierno extranjero en recibir este título. Se trata de un reconocimiento a su contribución al fortalecimiento de las relaciones bilaterales: «Es un honor recibir la Orden del Druk Gyalpo. Se la dedico a los 140 millones de indios», escribió el primer ministro en X inmediatamente después de la ceremonia.
El momento más significativo de la visita fue la inauguración de la central hidroeléctrica Punatsangchhu-II, una planta de 1020 megavatios financiada por Delhi y destinada a convertirse en una de las principales fuentes de energía de Bután. Con este proyecto, la capacidad productiva total del país alcanzará unos 3000 megavatios, con un aumento cercano al 40 %. El exceso de electricidad producida (la demanda interna es de unos 1000 MW) se venderá a la India, lo que reforzará el comercio bilateral y proporcionará mayor liquidez a las arcas de Bután.
Además de los acuerdos gubernamentales, la cooperación también se está ampliando en el sector privado. Varias grandes empresas energéticas indias, entre ellas Tata Power, Adani Group y Reliance Power, han firmado acuerdos con la Druk Green Power Corporation, el organismo público butanés encargado de la gestión del sector hidroeléctrico. El objetivo es desarrollar nuevas instalaciones, aumentando la capacidad energética de Bután y la disponibilidad para el mercado indio.
Sin embargo, la visita de Modi no tiene un significado exclusivamente económico. En los últimos años, China ha intensificado sus contactos diplomáticos con Bután y ha acelerado las negociaciones para la definición de las fronteras. Pekín y Thimphu, que no mantienen relaciones diplomáticas formales, firmaron en 2021 un memorando de entendimiento para la realización de un proceso en tres fases (negociación, deliberación y demarcación) con el fin de establecer formalmente la frontera entre ambos países.
Las zonas en disputa incluyen las regiones de Doklam, Pasamlung y Jakarlung. La meseta de Doklam es especialmente sensible para Nueva Delhi: un posible acuerdo que concediera más margen a China acercaría a Pekín al corredor de Siliguri, la estrecha franja de territorio que conecta los territorios del noreste de la India con el resto del país.
Las inversiones anunciadas por Modi adquieren, por tanto, un valor estratégico. La India pretende preservar su histórica influencia sobre el reino himalayo y evitar una posible apertura de Bután hacia Pekín, que podría alterar el equilibrio de seguridad en toda la región. Las ayudas económicas, los proyectos de infraestructura y el renovado compromiso político tienen por objeto reafirmar el papel de la India como socio privilegiado de Bután en un momento de creciente competencia geopolítica en el Himalaya.
