El Asia que dona y recibe el Óbolo de San Pedro
En vísperas de la Jornada por la Caridad del Papa, que se celebrará el domingo 26 de junio, los datos difundidos por el Vaticano muestran que Corea del Sur es el cuarto país donante. De los 9,8 millones de euros que el pontífice destina a proyectos para las comunidades más necesitadas, más de una cuarta parte va a parar a Asia.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - El domingo 26 de junio -como todos los años, el domingo más cercano a la fiesta de los santos Pedro y Pablo- las diócesis de todo el mundo celebrarán la Jornada por la Caridad del Papa. Ese día, en las parroquias, se hará la colecta del Óbolo de San Pedro, es decir, las ofrendas que se envían al Vaticano desde todos los continentes para que el pontífice las destine a su ministerio y a las situaciones de mayor necesidad. El Papa utiliza estos fondos, por ejemplo, para enviar ayuda de emergencia a poblaciones afectadas por guerras o catástrofes naturales.
En vísperas de la Jornada por la Caridad del Papa, la Santa Sede ha dado a conocer recientemente algunos datos sobre los donativos recaudados en 2021 y su destino. Estos datos muestran tanto la generosidad de los católicos en Asia como la especial atención del Papa Francisco a las difíciles situaciones que se viven en este continente.
En cuanto a la voluntad de contribuir a este fondo, las Iglesias de Corea del Sur confirman su gran confianza en la caridad del Papa: el país del Extremo Oriente ocupa, de hecho, el cuarto lugar en el ranking de donantes, con 1,4 millones de euros (alrededor del 3,2% de todas las ofrendas que llegan a este fondo vaticano). La cifra es significativa porque entre los tres primeros puestos se encuentran Estados Unidos (13 millones), Italia (5 millones) y Alemania (2,3 millones), países que tienen una larga tradición de apoyo al Óbolo de San Pedro. Y entre los 10 principales países contribuyentes, Corea del Sur es el único fuera de Europa y América.
También hay que añadir que en 2021, 6,5 millones de euros (el 14,6% de las donaciones) destinados al Óbolo de San Pedro vinieron de países que no están en la lista de los 10 "grandes contribuyentes": es fácil imaginar, por tanto, que esta cifra incluye también las ofrendas enviadas por muchas otras pequeñas comunidades católicas de Asia.
Al fin y al cabo, las Iglesias de Asia en muchas ocasiones experimentaron la cercanía de la caridad del Papa en momentos de dificultad o para realizar proyectos que, de otro modo, difícilmente se habrían concretado. El Óbolo de San Pedro destinó en 2021 un total de 35 millones de euros a obras en todo el mundo -tanto a través de actividades promovidas por el Papa a través de las oficinas de la Curia Romana, como de proyectos de asistencia directa a las comunidades más necesitadas. Los proyectos de asistencia directa financiados por la caridad del Papa ascendieron a 157 por un total de 9,8 millones de euros. Y es interesante observar que el 25,5% de estos fondos fue a parar a Asia, a 38 proyectos en las áreas de desarrollo social, apoyo a actividades de evangelización y construcción de nuevas iglesias.
A modo de ejemplo, el informe del Óbolo de San Pedro menciona tres iniciativas realizadas en Asia: en Cubao (Filipinas), el apoyo a un proyecto de lucha contra el flagelo de la explotación sexual y el tráfico de menores por Internet; en Indonesia, la construcción de dormitorios en el seminario "Jesús es el Señor", de la diócesis de Maumere; y en la India, la construcción de la parroquia de Dalabari en la diócesis de Bongaigaon, en el estado nororiental de Assam.
